MADRID, 24 (EUROPA PRESS)
La globalización y el cambio climático están provocando la
reaparición de plagas "propias del siglo pasado" que se consideraban
"extintas" u "olvidadas", según han advertido los expertos
del sector, reunidos este viernes en la Feria y Congreso Profesional EXPOCIDA
IBERIA 2012, que se celebra estos días en Ifema.
En este sentido, el presidente de la Junta de Gobierno de la
Asociación Nacional de Empresas de Control de Plagas (ANECPLA), Pedro de
Orueta, ha señalado que uno de los problemas es que "la sociedad no tiene
la percepción de que existan este tipo de especies", puesto que
"muchas ni siquiera se pueden ver".
Por ello, ha destacado la importancia de
"sensibilizar" a la población sobre este aspecto, así como de cambiar
la imagen que tiene la sociedad de este sector, que ven al colectivo "como
fumigadores que sólo se preocupan de acabar con los bichos" sin importarles
lo demás. "Cuando en realidad --sentencia De Orueta-- se ocupa de proteger
el bienestar de las personas con el menor impacto sobre el medio ambiente y la
biodiversidad".
LA CRISIS, OTRO DE LOS POSIBLES MOTIVOS
Por su parte, la directora general de ANECPLA, Milagros
Fernández de Lezeta, ha apuntado que la crisis "podría ser otro de los
factores que haya potenciado la reaparición de este tipo de plagas", al
entender que "se ha invertido menos dinero, por ejemplo, en el
mantenimiento de instalaciones". En cualquier caso, ha insistido en su
intención de "no ser alarmistas", aunque insta a estar
"atentos" a cualquier novedad.
Durante esta jornada, que ha reunido a profesionales de la
industria del control de plagas de diferentes partes de Europa, se ha presentado
un estudio elaborado por ANECPLA --con la colaboración de la Universidad
Autónoma de Madrid-- que constata un incremento de hasta un 70 por ciento en la
prestación de servicios de control de chinches de la cama en los últimos cinco
años en España y Portugal.
De esta forma, se pone en evidencia que España "no es
ajeno a esta incipiente plaga de ámbito mundial, erradicada en el país hace
medio siglo, y que se ha convertido en un daño emergente en Europa y Estados
Unidos, así como otros países desarrollados entre los que destaca
Australia", según ha señalado la asociación.
Fernández de Lezeta ha insistido en que "los chinches
de la cama se han convertido en un problema social" y, debido a la
dificultad de erradicación, resulta "imprescindible" que la sociedad
tenga la información suficiente para detectarla y prevenirla. Para ello, ha
reclamado la colaboración de todos los agentes implicados: responsables de las
instalaciones, empresas de servicios y autoridades sanitarias.
LAS CHINCHES SE INSTALAN EN LAS VIVIENDAS
Según este estudio, un 80 por ciento de las empresas
relacionadas con el sector asegura haber llevado a cabo servicios de control de
chinches de cama durante el último quinquenio. Así, la mayoría de los
tratamientos se han llevado a cabo en las viviendas (el 35 por ciento), en los
hoteles, hostales y pensiones (el 30 por ciento), albergues (10 por ciento),
hostelería (5 por ciento), seguido de residencias de ancianos, transporte
público, colegios, guarderías, universidades y centros de ocio.
El incremento de los viajes y el turismo "podrían ser
la principal causa de resurgimiento" de esta plaga en concreto. Así lo ha
puesto de manifiesto ANECPLA, que destaca que tiene una especial incidencia en
Canarias y en la cuenca mediterránea. "El origen podría ser el tránsito de
mercancías y equipajes contaminados, la falta de inspecciones, la negación de
incidentes y la falta de notificaciones", añade el informe.
Las chinches de la cama son insectos de actividad nocturna
que se alimentan exclusivamente de sangre, preferentemente humana, por lo que
suelen alojarse en lugares próximos a su fuente de alimentación. Colchones,
mesillas de noche, sofás, armarios, ropa de cama o somieres, son un refugio
habitual de esta plaga que "produce molestas picaduras y que en los
últimos años --tal y como concluye el estudio-- se ha convertido de nuevo en un
problema social a nivel mundial".
Fuente: La Vanguardia
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