La avispa asiática asesina se extiende por el Alt Empordà. Los apicultores ya han la han localizado en Portbou, a 30 km del inicio de la plaga

Los apicultores gerundenses alertan de que ya se han encontrado ejemplares de la 'avispa velutina', un animal asiático que mata las abejas tradicionales, en un radio de 30 kilómetros del punto donde se localizaron los primeros ejemplares de esta plaga, en Garriguella (Alt Empordà). Los apicultores aseguran que están "preocupados" porque es posible que el insecto ya se haya esparcido por la comarca del Alt Empordà.

"Hay trampas en la montaña pero desde hace un tiempo los apicultores no pueden acceder y visitar las colmenas debido a la sequía", ya que los profesionales precisan quemar cartones y restos de madera para provocar el humo que ahuyenta a las abejas y permite acceder a las colmenas, resaltó el presidente de los Apicultores Gerundenses Asociados, Ángel Noguer. Además de esta plaga, el sector también ha sufrido las consecuencias del gran incendio del Alt Empordà con más de un centenar de cajas quemadas a causa del fuego.

La avispa velutina, más conocida como avispa asiática o avispa asesina, es un insecto carnívoro proveniente de China que mata a las abejas tradicionales comunes para alimentar a sus larvas. Este animal, tres veces más grande que las abejas de la zona, ya está considerado como una plaga después de extenderse por Francia y el País Vasco. Los expertos aseguran que a pesar de la espectacularidad del insecto - con el cuerpo oscuro y las patas amarillas-el animal no es agresivo con las personas aunque sus picaduras son muy dolorosas.

Especie invasora en pleno apogeo

Desde el gremio están alarmados porque esta especie invasora de avispa llega a su punto álgido de movimiento a finales del mes de agosto. "Durante el mes de agosto y septiembre es cuando se pueden ver más ejemplares y se puede analizar la situación, el alcance de esta problemática y controlarlo", ha resaltado Noguer.

El presidente remarcó que en los últimos años muchos apicultores se han trasladado a otras zonas de Girona o en los Pirineos donde hay un clima más favorable para el crecimiento de las abejas. "Debido al cambio climático y la falta de precipitaciones el sotobosque está muy seco y las abejas se mueren porque no encuentran comida", lamentó Noguer. Además, el presidente ha augurado que será "muy difícil" volver a recuperar la flora de esta zona.

La avispa velutina fue detectada en Francia en 2004 después de que un transporte de mercancías la importara de manera accidental desde Asia. Desde entonces hasta ahora su expansión ha sido de 100 kilómetros anuales de media. Más de la mitad de Francia está ya afectada como el País Vasco y ahora el Empordà.

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Publicado En lavanguardia.com, el 13 de agostoi de 2012